
Mierda, mi preservativo caduca mañana, sería una lástima dejar que se desperdicie, ¿no crees?
Otro método, un tanto más incruento, pero igualmente efectivo, es que cuando el hombre comience a perder el control de su eyaculación, la mujer le apriete intensamente la cabeza del pene, con lo cual se provocará un reflujo del semen y la detención del clímax.